Tegucigalpa, Honduras.- El tráfico en la capital hondureña alcanzó niveles críticos este miércoles debido a diversas reparaciones viales, calles en mal estado y semáforos dañados, en un contexto donde la efervescencia política también suma complicaciones.
Ciudadanos expresaron en redes sociales su frustración al señalar que, pese a salir con más de dos horas de anticipación de sus hogares, llegaron tarde a sus centros de estudio y trabajo.
Las dificultades viales en la capital parecen no tener una solución efectiva por parte de las autoridades, quienes hasta ahora no han logrado implementar una estrategia concreta para mejorar la movilidad.
En varios sectores, las calles permanecen cerradas por trabajos en proceso, mientras que en zonas como la salida a Olancho, las obras están totalmente paralizadas.
Más allá de las deficiencias en la infraestructura, muchos internautas coinciden en que el mayor problema es la falta de educación vial de algunos conductores de buses, taxis y motocicletas, quienes realizan maniobras peligrosas, invaden carriles o rebasan sin precaución, agravando aún más la situación.
Como resultado de estos factores, el tráfico en Tegucigalpa colapsó nuevamente este miércoles, un panorama que, según los ciudadanos, se ha vuelto parte de la cotidianidad en las denominadas ciudades gemelas, donde incluso el martes se reportaron embotellamientos en todas las rutas a lo largo del día.
