Honduras.- Patrick Mahomes fue en 2024 el rey del Super Bowl que conquistaron los Kansas City Chiefs ante los San Francisco 49ers, pero este año, como sucedió en la edición anterior, el foco de atención en las gradas apunta nuevamente a Taylor Swift.
La estrella del pop y novia de Travis Kelce, el destacado ‘tight end’ de los Chiefs, será una de las figuras más comentadas durante el Super Bowl de este domingo, en el que Kansas City se enfrentará a los Philadelphia Eagles en el Caesars Superdome de Nueva Orleans, Luisiana.
Se espera que Swift asista al partido para apoyar a su pareja, y la retransmisión televisiva seguramente no perderá la oportunidad de captarla en cada celebración o reacción, tal como ocurrió en 2024.
Más allá de un simple gesto hacia los ‘swifties’ —los seguidores de la cantante—, la relación entre Swift y la NFL se ha convertido en un fenómeno mediático que ha beneficiado enormemente a la liga. El año pasado, el Super Bowl alcanzó una audiencia récord de 123,4 millones de espectadores, en gran parte impulsada por la presencia de la artista.
Ante las especulaciones sobre la relevancia de Swift en la NFL, la liga emitió en octubre de 2023 un comunicado en el que defendía la conexión entre el fútbol americano y la cantante.
“Las noticias sobre Taylor Swift y Travis Kelce han sido un momento de cultura pop al que nos hemos acercado en tiempo real como una intersección de deporte y entretenimiento. Y hemos visto una increíble cantidad de positividad”, señaló la NFL en su mensaje.