Tegucigalpa, Honduras.- Un grupo de maestros del Programa Hondureño de Educación Comunitaria (Proheco) se manifestó este martes en el Congreso Nacional, exigiendo que se les reconozca su calificación académica que les permitiría acceder a un salario digno.
Javier Hernández, docente proveniente de San José, La Paz, explicó que actualmente reciben un salario de 10,800 lempiras mensuales, pese a contar con estudios superiores.
Según Hernández, sus contratos los clasifican como instructores, lo que les impide recibir un salario base adecuado, que debería rondar los 19,000 lempiras.
Los maestros enfatizaron que desempeñan un papel fundamental al llevar educación a las comunidades más alejadas del país, pero su esfuerzo no es valorado.
«Llevamos el pan del conocimiento a los lugares más recónditos, pero no se nos reconoce como corresponde», declararon los manifestantes.
La protesta coincidió con la reapertura de las sesiones legislativas tras un receso iniciado el pasado 18 de diciembre.
Los maestros Proheco, provenientes de distintos departamentos, exigieron a los diputados consensos para garantizar el respeto a su calificación académica y mejorar las condiciones laborales en el sistema educativo del país.