Tegucigalpa, Honduras.- La Policía Nacional mediante la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) capturó a dos presuntos miembros de la Mara Salvatrucha (MS-13), señalados como responsables de la privación de libertad de cinco hondureños de la etnia garífuna en julio de 2020.
Este caso marca un precedente en el país al incluir, por primera vez, una acusación formal por el delito de asociación terrorista.
En ese contexto, la operación fue ejecutada por un equipo especializado de la Unidad Nacional Antisecuestros (UNAS), que se trasladó al litoral atlántico tras años de investigación e inteligencia. Los detenidos fueron identificados como:
- Alias “El Guato” (36 años), gatillero de la MS-13, originario y residente de Tela, Atlántida.
- Alias “El Negro Moche” (44 años), ranflero de la misma organización.
Durante el operativo, las autoridades confiscaron 10 teléfonos celulares que serán analizados forensemente para recopilar evidencia adicional que podría involucrar a otros miembros de la estructura criminal.
Es de recordar que, el incidente ocurrió el 18 de julio de 2020, cuando hombres armados y vestidos con ropa similar a uniformes policiales ingresaron a viviendas en una comunidad garífuna y llevaron a la fuerza a cinco personas.
Según las investigaciones, las víctimas fueron atacadas por negarse a colaborar en actividades delictivas relacionadas con el tráfico de drogas.
Desde entonces, la DPI trabajó en la identificación de los responsables, enfrentando retos como el temor de los testigos a represalias.
Sin embargo, mediante el uso de técnicas avanzadas y recopilación de pruebas, se logró dar con los presuntos implicados.
Implicaciones legales
Los capturados enfrentarán cargos por:
- Asociación terrorista, delito tipificado en el artículo 587 del Código Penal.
- Privación ilegal de la libertad.
- Allanamiento de domicilio.
- Robo con violencia e intimidación.
La Ley de Financiamiento Contra el Terrorismo de 2010 permite considerar como terroristas a miembros de maras y pandillas, lo que refuerza el marco legal en este tipo de casos.
Los imputados comparecerán hoy ante el Juzgado de Letras con Competencia Territorial Nacional en Materia Penal de San Pedro Sula, donde un juez decidirá las medidas cautelares a aplicar y los pasos legales a seguir.
Este es el primer proceso judicial en Honduras que incluye la acusación de asociación terrorista contra integrantes de una pandilla, marcando un hito en el combate al crimen organizado.
Hasta la fecha, tres miembros de la MS-13 ya cumplen condena por este caso, y existen 17 órdenes de captura pendientes contra otros involucrados.
La DPI reafirma su compromiso con la ciudadanía al continuar implementando estrategias para combatir la violencia y fortalecer la seguridad en las comunidades.