La Paz, Honduras. – Un agente de la Policía Nacional disparó su arma de fuego contra un ciudadano en horas de la noche del lunes durante un operativo en Marcala, La Paz, en el occidente de Honduras tras la negativa del hombre a detenerse ante la orden de los uniformados.
Según el reporte oficial, los agentes realizaban un patrullaje de rutina en el barrio San Andrés cuando observaron a un individuo en bicicleta, cuya conducta les pareció sospechosa.
Al intentar detenerlo, el ciudadano supuestamente hizo un gesto amenazante al llevar una mano a la cintura, lo que llevó a la agente Karla Vásquez a disparar, hiriéndolo en la mano izquierda.
El herido, identificado como Deivis Adán Pineda, fue atendido inicialmente en el centro de salud local y posteriormente trasladado al Hospital Suazo Córdoba en La Paz para recibir atención médica especializada.
En un video grabado después del suceso, Pineda lamentó que la herida le impida continuar trabajando. «Mire lo que me hicieron, un tiro… no podré trabajar… les juro por Dios que no hice nada», declaró entre lágrimas, cuestionando la reacción policial.
Investigación y conciliación
Tras el incidente, la Policía Nacional informó que la agente Vásquez fue presentada ante el Ministerio Público para una audiencia destinada a esclarecer lo sucedido.
La conciliación en estos casos permite analizar si la respuesta policial fue proporcional y evitar un proceso judicial prolongado.
Finalmente, se decidió dejar en libertad a la agente Vásquez, al considerar que actuó en legítima defensa al percibir una posible amenaza.
No obstante, la institución policial expresó su compromiso de mejorar los protocolos de actuación para reducir el uso de fuerza letal en entornos urbanos y reforzar la capacitación en toma de decisiones bajo presión.