Tegucigalpa, Honduras.- En medio de un ambiente lleno de entusiasmo y energía, la Policía Nacional inauguró el torneo deportivo “Sin Armas, más Paz” con partidos de fútbol y baloncesto en las instalaciones del Instituto Central Vicente Cáceres.
La iniciativa cuenta con la participación de 52 equipos de fútbol sala y 34 equipos de baloncesto, tanto en categorías masculinas como femeninas, distribuidos en cinco ciudades. Tegucigalpa, San Pedro Sula, Choloma, Choluteca y La Paz.
La campaña impulsada por la Policía con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Oficina de Naciones Unidas para Asuntos de Desarme (UNODA) con el financiamiento de SALIENT tiene por objetivo, promover la reflexión entre niños, niñas y jóvenes sobre los efectos negativos del uso de armas de fuego como una solución a los conflictos.
Además de los partidos, se complementa con talleres de sensibilización, actividades deportivas y mensajes en redes sociales y espacios digitales.
Es así que el ministro de la Secretaría de Seguridad, Héctor Gustavo Sánchez expresó que “a través de estas actividades, los participantes se alejen del ocio, las armas, drogas, alcohol y cualquier influencia negativa, promoviendo la prevención mediante las artes, la sensibilización y el deporte”.
La ceremonia de inauguración del torneo también se llevará a cabo el próximo 24 de septiembre en San Pedro Sula, el 26 en Choluteca y el 28 en La Paz y que finalizará en noviembre, contando con el apoyo de entrenadores profesionales y ofrecerá a los jóvenes charlas sobre la resolución pacífica de conflictos, la prevención del uso de drogas y el alejamiento de la violencia y las pandillas.
Por su parte, el representante del PNUD en Honduras, Richard Barathe destacó que “el deporte es una herramienta fundamental para la prevención de la violencia, especialmente entre los jóvenes, quienes son las principales víctimas de muertes violentas por armas de fuego. Es vital crear espacios de sana convivencia para fomentar una cultura de paz”.
Además, el PNUD lanzará otra campaña, ‘Desarmados y Educados’ dirigida a niños y niñas entre 8 y 14 años en centros escolares de las mismas ciudades, con el objetivo de educar sobre los peligros de las armas a través de talleres y dinámicas preventivas.