Tegucigalpa, Honduras.- El Colegio de Biólogos de Honduras ha manifestado su firme oposición a la construcción de una cárcel en las Islas del Cisne. Los especialistas advierten que el proyecto podría causar un daño irreversible al ecosistema único de la región, hogar de numerosas especies endémicas y un santuario natural de vital importancia.
La propuesta del gobierno, que busca descongestionar las cárceles en el continente, ha sido recibida con preocupación por parte de los biólogos, quienes señalan que la introducción de infraestructura carcelaria podría alterar el delicado equilibrio ambiental. Además, subrayan el riesgo de contaminación del agua y el impacto negativo sobre la biodiversidad local.
La presidenta del Colegio de Biólogos, Ana Martínez, declaró: «Construir una cárcel en las Islas del Cisne sería un golpe devastador para uno de los ecosistemas más frágiles y valiosos de Honduras. Exhortamos al gobierno a buscar alternativas que no comprometan nuestra biodiversidad».
El Colegio de Biólogos ha hecho un llamado urgente a las autoridades para reconsiderar esta medida, sugiriendo alternativas que no pongan en peligro la riqueza natural de las Islas del Cisne. La comunidad científica y ambientalista se encuentra en alerta, organizando acciones para detener el avance de este proyecto que amenaza uno de los tesoros ecológicos del país.