En la catedral del boxeo, el Madison Square Garden, el boxeador de origen hondureño Teófimo López, destrozó todos los pronósticos derrotando al favorito Josh Taylor y arrebatándole inobjetablemente la faja de campeón mundial de peso superligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
Taylor salió fuerte los tres primeros asaltos, pero Teófimo tomó el control del combate desde el tercer asalto, se mostró rápido y certero en el golpeo llevándose la mayoría de los asaltos.
Las tarjetas de los jueces fueron por decisión unánime 115-113, 117-11 a favor de Teófimo que con ello le quitó el invicto a Taylor, quien no había peleado en los últimos 16 meses.
«Primero quiero agradecer a Dios. Ha sido un largo camino», dijo el peleador estadounidense de origen hondureño después de la pelea. «Derroté a Josh Taylor, un tipo duro que era el campeón y que fue campeón indiscutible.
«Ahora quiero preguntarles a ustedes: Aún lo tengo», dijo con una gran sonrisa Teófimo, quien instantes antes detuvo la entrevista post pelea para pedir disculpas a Taylor por decir que quería a «matarlo sobre el ring».
«Fue el calor de la situación. Lo que en realidad deseo es que llegues sano y salvo y te reúnas con tu familia. Eres un gran campeón», añadió López.
Con esta victoria, Teófimo López se convirtió en campeón mundial en dos categorías distintas. En 2020 fue campeón unificado de los ligeros al vencer a Vasyl Lomacnhenko en Las Vegas por decisión unánime. Sin embargo, perdió los títulos en su primera defensa contra George Kambosos Jr.
Sumó su decimonovena victoria como profesional y dejó su récord de derrotas detenido en uno. Mientras que el boxeador británico vivió la primera derrota de su carrera y dejó su registro de victorias en 19.
