Viena. El alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, ha advertido hoy de que el aumento de la pobreza en todo el mundo ha empeorado la situación de los derechos humanos y ha criticado las políticas de asilo de países como Reino Unido y Australia.
«Unos 300 millones de personas han vuelto a caer en la pobreza extrema. Eso es, por supuesto, también un problema de derechos humanos, a menudo no se ve así», ha señalado a la agencia APA en Viena, donde se encuentra para participar en el 30 aniversario de la conferencia de la que salió la creación del Alto Comisionado.
El experto en políticas de asilo aseguró que también en Europa ha crecido la pobreza, debido a las consecuencias de las crisis de la pandemia de la covid-19 y de la guerra por la invasión rusa de Ucrania.
Türk afirmó que los derechos humanos no deberían ser un juego de «ping pong dentro de las disputas geopolíticas» sino que es algo que afecta a las vida diaria de las personas.
«Cuando más de 60 hospitales dejan de funcionar, se ve que no les importa realmente lo que le ocurre a la gente, sino que sólo se trata del poder de dos hombres», puso como ejemplo Türk, refiriéndose a los graves enfrentamientos en Sudán entre el jefe del ejército sudanés, Abdel Fattah al-Burhan, y el jefe de la milicia, Mohamed Hamdan Dagalo.
El alto comisionado dijo que le gustaría que el debate sobre la migración en Europa fuera racional y basado en los hechos y que no se aleje de los derechos de los refugiados.
Así, criticó el plan de Reino Unido de deportar a Ruanda a solicitantes de asilo y dijo que no es compatible con los derechos humanos, según APA.
También dijo que el sistema de Australia de internamiento de migrantes es una «política de crueldad».
Igualmente, criticó los planes de Austria de enviar a Siria y a Afganistán a inmigrantes de esos países, y dijo que la situación de los derechos humanos en esos países no es compatible con deportaciones forzosas. EFE