La alarmante situación en Honduras ha encendido las luces de alerta en el sector agrícola. Representantes de la Asociación de Productores de Granos Básicos Prograno, han lanzado una advertencia sobre la grave escasez de granos básicos en el país, debido a la falta de lluvia a causa del impacto climático
El maíz y los frijoles, pilares fundamentales de la dieta hondureña, se encuentran en peligro debido a la sequía que experimenta el país.
Según Juan Valladares, Presidente de Prograno, las perspectivas para la próxima temporada son desalentadoras. Se espera que solo haya 50 días de lluvia en total, y se registraría 25 días en el corredor seco, una de las principales regiones productoras de alimentos en Honduras. Esta sequía prolongada imposibilitará la producción de los productos alimenticios necesarios para cubrir la demanda del país.
Manifestó además que, dadas las condiciones climatológicas imperantes, con precipitaciones esporádicas no hay posibilidades de tener una adecuada producción.
Recordó que con las lluvias que se presentaron comenzaron a sembrar lo que se llama “en seco” con la esperanza que la semilla germinara, pero la lluvia no ha llegado como se debe y corren el riesgo de perder esa producción.
“Las condiciones de lluvia este año son erráticas y si esto no cambia tendremos problemas severos, ojalá que no” manifestó Valladares
El directivo de Prograno hizo un llamado al Banco Nacional de Desarrollo Agrícola, Bandeas para que solucionen algunos problemas que se presentan en el otorgamiento de préstamos, pidió a sus funcionarios mayor diligencia porque un crédito tardío es un crédito con alto riesgo.
La crisis agrícola en Honduras es una llamada de atención para el país y para la comunidad internacional. La garantía de la seguridad alimentaria debe ser una prioridad en la agenda, y es necesario adoptar medidas preventivas y de adaptación frente al cambio climático para asegurar un suministro suficiente y sostenible de alimentos en el futuro.
